Entrenando

Al salir del templo, decido ir a un lugar, abandonado, a entrenarme, aunque se un prodigio en mi arte, nunca esta demas entrenerme, ya que si uno no practica esas habilidades se oxidan, luego de caminar unos cuantos kilometros, llego a dicho lugar, si que estaba abandonado, un par de casas estaban deterioradas y desabitadas, unos cercos destruidos, y un amplio terreno, todo erocionado, por falta de agua y por los animales que alguna vez pastaros en estos lugares.
Me dirigo al centro de aquel terreno, y me pongo en posición de batalla, espero un momento con mis ojos cerrados, con mi katana en mis manos, aun con su funda, luego digo, Gehou, y una especie de polvo sale desde donde estaba parado, sin que corriera aire, luego digo, Kou, y mi aura, se centra en mi katana, la cual cambia su color, luego digo, Gyo, y mi aura se desplaza de mi katana a mims ojos, los cuals cambien de color, y luego digo, Mi control nen esta bien, prosegire con lo siguente., entonces digo Zetsu y mi aura se hace imperceptible, luego desenfundo mi katana y dejo a Mono-hoshi-zao con su filo al descubierto, luego hago unos movimientos con esta, como si estuviera peleando, luego al terminar, vuelvo dejar meter a su funda a Mono-hoshi-zao, luego digo, Magia:Fulgory unas lengua parecidas al fuego negro aparecen de la nada y me rodean, luego digo Swallow Reversal y me salen unas alas negra en mi espaldas las cuales me cubren y me tranforman en un demonio, al terminar empiezo a combatir con aquellas lenguas del fulgor que cree, luego de unos minuos peleando, paro y digo Swallow Reversal:fin, ya habia terminado mi entrenamiento, estaba algo agotado, decido hacer un pequeño descanso, me dirigo a la casa abandonada, y busco una banca, la limpio y me siento en ella, luego dejo una pequeña paquete envuelto en un paño de tela, lo abro y saco un onigiri, el cual me lo como mirando el horizonte.

Al terminar mi onigiri, dejo el otro para mas rato, entonces me pongo de pie y vuelvo al centro de aquel. terreno, y siento un aura a lo lejos, no parecia la de un animal, era mas bien humana, pero algo diferente, pero parecia, que no era enemiga, puesto que se habia quedado parada, sin hacer ningun movimiento, no le presto mayor importancia y vuelvo a mi entrenamiento, entonces me digo es hora de subir un poco de nivel, y luego de decir esto desenvaino a mi Mono-hoshi-zao y digo kou y el filo de esta se torna negro, luego digo, Magia:Fulgor y nuevamente aparecen aquellas lenguas de algo parecido al fuego negro pero esta vez empezaron a quemar la tierra, ya que es el mismisimo fuego del infierno, entonces las empiezo a combatir con mi Mono-hoshi-zao, luego de varios minutos de intensa batalla, termino esta parte del entrenamiento, aun se encontraba aquella aura a lo lejos, no me preocupaba mucho, pero no me gustaba que se escondieran de mi, entonces grito, Oye, ya no es necesario que te sigas escondiendo, si te preocupa que te ataque, no va a hacer asi, te doi mi palabra, esperaba que me ubiese escuchado, ya que no queria hacerle daño, estaba un poco agotado y no queria pelear.

Al ver que aquella aura, salia de su escondite, me doi cuanta a medida que se hacerca, que es solo una naña, o quizas solo por apariencia, no me movi de mi lugar, hasta que ella se encontraba al frente mio, luego me percato que observaba el entorno, entonces oigo sus palabras y digo, muy seriamente
No te preocupes no te atacare y tampoco es una trampa, le di mi palabra, de que no la atacaria, y eso pienso hacer, y por otro lado, si buscas a mi master no la encontraras., al terminar de decir aquello, meto es su baina a Mono-hoshi-zao, y la coloco en mi cintura, luego me dirijo a la banca, donde se encuentra mi alimento y digo
Tienes hambre, puesto que as estado hace mucho tiempo por aqui, y quizas sietas hambre, si quieres comer toma
Le ofresco uno de mis onigiris que me quedaban, y el otro me lo empiezo a comer, para que no creyera que estaban envenenados o algo por el estilo.

Al ver que la joven se sentaba a mi lado, y comia el onigire que le ofreci, luego miro al horizonte comiendome tranquilamente mientras comia mi onigiri, luego de terminar saco una servilleta y me limpio, luego saco otra y se la ofresco a la señorita, luego me levanto y digo con voz seria y tranquila
Y que le a traido por estos lares señorita, no es que me interese, pero es algo preligroso, a todo esto soy Assassin, para servirle
Lego de presentarme, la miro a sus ojos, esperando su respuesta, mis ojos no mostraban ningun tipo de emocion.

Veo como termina de comerce su onigiri, se levanta y se presenta, la miro por unos instantes sin decir nada luego desvio mi mirada tranquila hacia el horizonte, para decir con mucha calma, y serenidad
Encantado Himeko-san
Me quedo mirando el horizonte por unos momentos, luego mira al cielo, me cubro los ojos con mi brazo derecho para ver la altura del sol, ya estaba bastante lejos, cuando habia llegado apenas habia aparecido, pero ahora estaba resplandeciendo en lo alto del cielo, a lo lejos siento algunas auras moviendose, quizas sean animales perdidos, no las podia identificar bien pero luego digo, In para hacer imperceptible mi aura, mas valia prevenir que lamentar.

Al oir aquellas, no me tranquilizo, ya que no eran las auras que habia sentido, estaban mucho mas lejos que esa par de gatitos, poso mi mano derecha en mi katana, y digo
Lamentablemente Himeko-san, el aura que senti no corresponde a esos dos gatitos, quizas sean de los que me estaban persigendo, puesto que se estan acercando.
Al terminar de decir aquello, un par de flechas aparecen de la nada en direccion de Himeko-san, en un acto rapido digo, Magia fulgor, y aquellas flecas se combierten en cenizas en menos de un segundo, luego poso mi mirada fria en ella, y veo que en su cabellera habian caido algunas cenizas y digo
Espero que me disculpe, cayeron algunas cenizas en su cabellera, si me permite
con mi brazo izquierdo limpiio aquellas cenizas con mucha delicadeza.

al sentri que aquellas figuras se acercaban mas, mis musculo se tensionaban, estaban deseosos de luchar, en mi cara se domostraba aquel nerviosismo por pelear, al oir aquellas palabras, la miro y digo con voz muy ansiosa
Como se le ocurre Himeko-san, este momenmto es presiso, no me negare a una pelea, usted solo quedese detras de mi y no le pasara nada.
Luego desenvaino mi Mono-hoshi-zao, y entregarle la funda a Himeko-san diciendo
Cuidado es algo pesada comparada con otras
Aquellos dos se acercaban cada vez mas, y mi tension se notaba en mi katana, ya se encontraban a menos de 5 metros, mi mano derecha sostenia mi katana, y con mis dedos de la mano izquierda, toco el filo de esta, al avanzar se coloca de color negro, esperando a aquellos dos.

al oir las palabras de mi acompañante, le doi una sonrisa y digo
No me demorare tanto, no se preocupe
Al terminar de decir aquello, aparecen los dos sujetos, ambos estaban con atuendos negros, parecian sombras, con dagas de ninjas, algo particular, luego los miro con una sonrisa y digo friamente
Asi que los a mandado Caster, ela deve saber que con dos cucarachas como usted no servira para llevarme de vuelta, cuando yo quiera volvere y ella lo sabe bien, lo as esscuchado.
Al terminar de decir aquellos, aquellas sombras me atacan, las evado facilmente, luego golpeo a una con el mango de mi katana, y encegida digo, Magia fulgor, y la sombra se rostiza, luego tomo a mi Mono-Hoshi-zao, con ambas manos, para combatir al mas fuerte de los dos, el hace el primer ataque, lo esquivo y le quito ambas armas de su mano, luego con mi mano izquierda le golpeo en diferentes puntos de su cuerpo, luego de unos momentos, me acerco a Himeko-san y digo
La funda porfavor, ella me la entrega, guardo mi katana, y mi oponente cae arrodillado, luego abrazo a Himeko-san y digo esto no lo tiene porque ver, mejor nos vamos de este lugar al momento de decir aquello se oye una explocion, el curpo de mi oponente habia explotado por la presion de su sangre, y todo el terreno quedo bañado en esta.

Al ver como Himeko reaccionaba por lo sucedido, decido acceder a su peticion, entonces digo
Bueno, ya que este lugar no es muy tranquilo, asi que prefiero otro
Al terminar de decir aquello, le doi mediavuelta y la empugo por su espalda, guiandola por aquel lugar, puesto que aun tenia su cinta cubriendole sus ojos, luego de caminar un poco, me doi media vuelta y digo Magia fulgor, mirando el campo de batalla, en el cual un enorme circulo negro aparecio, quemando todo, al terminar un gran crater aparecio, quemando todo rastro de la batalla, luego me doi media vuelta nuevamente y digo
con vuestro permiso Himeko-san
Y la tomo en mis brazos, ella aun con su cinta en los ojos, y empiezo a correr, algo apresurado para sacarla de aquel lugar.

continuacion