Invocación en mitad de la nieve...

Había salido de aquel templo atravesando las montañas nevadas, llevaba conmigo una lanza que me dijeron que debía llevar conmigo para poder invocar a mi servant. Buscaba un lugar donde hubiera alguna mínima ventisca pero me conformé con una explanada nevada y el cielo despejado, miré al cielo el cual estaba estrellado y había una luna muy finita en el cielo.
Suspiré y dejé la lanza sobre mis manos extendidas hacia delante. Una suave brisa me envolvió meciendo mis cabellos hacia arriba y elevando la lanza dentro de una espiral nevada, el cielo comenzaba a nublarse conforme comenzaba a recitar el conjuro de invocación...

Por el poder que me ha sido otorgado por mis antepasados y por Oichi Oda iniciadora de mi clan, os suplico a vos que me escucháis desde allá que os encontréis, traedme a aquel dueño de esta lanza frente a mí para que me ayude con mis propósitos y sea mi servant de aquí en adelante!

Tras finalizar mis palabras la suave ventisca que rodeaba la lanza se volvió como un espeso tornado de nieve que estaba estático y se alzaba hasta el oscuro cielo.

No me moví ni un milímetro de mi posición ni aun cuando la poderosa onda de luz apareció. Cuando apareció aquella figura humana frente a mí toda ventisca desapareció y todo volvió a la calma, tras escuchar su presentación hice aquello que las demas sacerdotisas me dijeron que hiciera, lo miré a los ojos y dije firmemente - Yo soy aquella que te invocó, Aran Tsuky, descendiente directa de Oichi Oda - digo seria, nunca solía estar tan seria, solía ser mas alegre pero no era el momento de hacer tonterías - Me gusta tu forma de hablar Nagamasa - digo con una amplia sonrisa mas relajada, no podía estar mas tiempo con esa seriedad - Aunque tu nombre es algo lioso.. mmm... te llamare... Naga! - Digo con una amplia e inocente sonrisa

Me quedo algo paralizada al ver la reacción de Naga ante mi confesión de mi descendencia - e.. etto.. si... eso fue lo que me dijo mi abuela y las sacerdotisas del templo - digo encogiéndome de hombros - por eso te invoqué a ti y no a otro.. bueno en verdad me dijeron que debía invocar y blablabla... - digo despreocupada viendo como se acercaba tanto a mi, llegando a ponerme nerviosa por su cercanía y por como miraba mi rostro tan fijamente - e..etto... Naga.. pasa algo con mi cara?? - digo al ver como me miraba de ese modo

Sonreía alentadoramente dispuesta a decirle que no tenía que tratarme de ese modo siempre lo había odiado, prefería un trato mas cercano, pero al oir que me decía que era muy hermosa me sonrojé desviando la mirada - e.. etto no tienes de que preocuparte - digo mientras le miraba aun sonrojada escuchando seguidamente su siguiente argumento y suspiré - Oka.. pero te llamare Lanc! - digo intentando animar la cosa y olvidar el sonrojo - Pero no me llames Master... dime Tsuky o Aran... como prefieras pero no master.. - digo con una amplia sonrisa, me recordaba a mi padre que me hacía ser muy inferior a el y no me gustaba que me hicieran muy superior... Ahora lo único que nos quedaba era encontrar donde establecernos y sobre todo comenzar con nuestro camino hacia la guerra del santo grial - [color:fd68=deepsky blue] Lo mejor sera que emprendamos camino ya no es bueno quedarse aqui por mas tiempo - digo mirando a Naga con una sonrisa un poco seria

Giré mi rostro para mirarle, no me agradaba nada que me dijeran Master, pero menos todavia que me dijeran señorita.. -.-U - Iremos a un templo que heredé de mi difunta madre, del cual no conoce mi estúpido padre - Digo suspirando mientras caminaba al lado de Nagamasa - Allí veremos por donde empezar y te dije que me llamaras Tsuky no Señorita Tsuky - digo seria mientras nos íbamos de aquel lugar